Las actividades complementarias y extraescolares son fundamentales en la vida de cualquier centro educativo, pero concretamente en el nuestro adquieren una relevancia tal, que hace que su peso específico sea incluso superior al curricular a la hora de conseguir una formación integral de nuestros alumnos/as.
Dada la carencia de recursos culturales, deportivos y de ocio en el barrio, así como el rechazo de nuestro alumnado a las actividades puramente académicas, la realización de estas actividades constituyen un instrumento fundamental del centro como recurso para compensar estas deficiencias.
Por otra parte, creemos que la potenciación de las visitas y salidas proporcionan a nuestro alumnado oportunidades para el conocimiento del mundo natural, histórico y social así como de otros modos de vida, para desarrollar su participación activa y responsabilidad personal en la vida diaria de nuestro centro como ciudadanos de su sociedad presente y futura. Conocer su ciudad compartiendo sus tradiciones, participando en su cultura, visitando las instalaciones de sus servicios públicos… conociendo otras ciudades. Participar en actividades programadas por Corporaciones Locales, integrándolos como miembros activos en la vida diaria de su ciudad.
Con las actividades buscamos una mayor comunicación con nuestro alumnado que traerá como consecuencia el conocernos mejor y por lo tanto un aprecio mutuo para aumentar las capacidades de “escucha, diálogo, respeto, sociabilización, responsabilidad y participación, amistad, confianza, cooperación en un medio ambiente distinto” para obtener actitudes de mejor convivencia en el aula, y por lo tanto un mejor rendimiento en el conjunto del proceso de enseñanza - aprendizaje.
La realización de actividades de manera conjunta, cuando proceda, con nuestro centro adscrito de Primaria C.E.I.P. Menéndez Pidal, con el que nos encontramos unidos dentro de nuestro Proyecto Intercentros Escuela, Espacio de Paz, constituye una estrategia clave y fundamental a la hora del “conocimiento mutuo” de las “comunidades educativas” de ambos centros, en planes de acogida, tránsito, semana cultural, integración de las familias en el proceso educativo… para establecer criterios comunes enfocados a disminuir el desfase o ruptura en el paso de una etapa a otra, en el establecimiento de un marco de trabajo común.